jueves, 12 de noviembre de 2009

Volver a empezaaaar otra vez.

La verdad que mi horario, ahora mismo, ha hecho que mi vida consista en que no tenga vida... valga la redundancia.

Me gustaría que cuando leyerais el titulo de este post os llegara esa cantinela de los anuncios del Corte-Inglés, donde los niños felices y contentos salían con sus uniformes de niños pijas, saltando y corriendo cargados con maletas llenas de libros.

Este post me ha quedado un poco largo, pero bueno…os aguantáis, XD ¿No queríais que escribiera más? Pues eso.

El título se refiere a dos cosas, una; mi vida estudiantil a la que he vuelto, y otra a mi vida doméstica que también vuelve a las andadas… A lo largo del post os lo iré explicando.

Últimamente no he posteado porque me levanto a las 7 de la mañana para estar a las 7 y media en un quiosco. Sí, un quiosco, el trabajo soñado para cualquier vago. Si tuviera internet en el quiosco sería más divertido, pero hasta que no me pille el Wi-Fi de Vodafone, la cosa está chunga. Lo que sí tengo es una tele de cuando mi abuela era chica que afortunadamente tiene TDT, y gracias a ella me dedico a ver Bob Esponja, Spiderman, Batman y “Phineas y pherb”. Resumiendo…mi vida es algo triste.

Por la tarde tengo clases de 3 y media a 5 y media, y otros días de 5 y media a 9. Me he matriculado en pocas, más que nada de primero, porque con la gracia de que el año que viene entra el plan Bolonia, no tendré asignaturas a las que matricularme, acabaré teniéndome que pasar a Bolonia y me veré obligado a volver a empezar con todo… qué triste…No me acuerdo de nada, y tenerme que poner ahora a derivar, o a programar en IP…Si es que encima no recuerdo ni qué era el eclipse…

En clase me siento como en casa, hay gente de mi quinta XD, y muchos novatos, bueno, no tantos… pobrecitos la verdad, ya que acabarán en Bolonia al igual que yo… Así que vaya mierda…

En fin, yo pensé que en el quiosco me aburriría como una ostra, pero ya me han pedido el libro de reclamaciones. Yo no sabía que en un quiosco se podía pedir, y por lo que se ve, aún no lo sé, porque mi jefa (amiga de mi madre) me dijo al llamarla que tenía que decirle al cliente que tendría que venir por la tarde, y claro, el cliente se fue.

-Vamos a ver chaval, con lo fácil que es darme la revista que tienes ahí arriba…

-Pero… ¿Me tengo que subir a la escalera? Ufff… ¿No le interesa mejor la Hobby Consolas?

-No… mi hijo me ha pedido la Nintendo Acción…

-pero si la Hobby es mucho más completa.

-Vaya tela…ya vendré por la tarde…

Al final me ahorré subirme a la escalera. Últimamente me muero de sueño y mi jefa está harta que los clientes se quejen de que siempre ando medio dormido, qué más les dará, si cuando me despiertan les atiendo perfectamente:

-Oiga joven, se ha quedado usted traspuesto.

- Mmmmm,asafahgsad

-¡¡Joven!! – La señora me golpea con el bastón.

-¿Qué quiere? –somnoliento.

-Pues me gustaría saber si tiene chicles de fresa.

-Noooo… -mientras me vuelvo a echar…

-Pero si están ahí.

-Eso es fresa ácida, no es lo mismo.

-Ainss, joven, no me ponga enferma, démelos sino quiere que le vuelva atizar.

-Ok… tome señora…

Yo estoy acostumbrado a dormir unas 12 horas, y ahora…
Al menos el quiosco me da dinero para sobrevivir en el piso de estudiantes hasta que encuentre algo mejor…

¿Piso de estudiantes? ¿No era el de unos árabes? Digamos que no…

Volvamos atrás un par de semanas, no muchas la verdad, porque fue poco después del anterior post.

Hubo una especie de fiesta en casa de los árabes, bueno… fiesta, fiesta… éramos los tres del piso y dos amigas de ellos. Yo no recuerdo qué pasó, quizás estaba borracha, pero una de las árabes empezó a encandilarme, me dijo que era guapo, por lo que supuse que tenía algo más que alcohol en sangre, quizás estupefacientes o cosas raras que toman ellos. Por otro lado tenían una cachimba, pero olía extrañamente a maría, yo tenía entendido que las cachimbas se hacían con otra cosa.

Yo comí de esos pastelitos que trajeron, y la verdad que acabé algo mareado y no sé por qué la árabe seguía diciéndome cosas. La verdad que era poco agraciada y olía raro, pero como yo tampoco es que tenga muchas opciones por ahí fuera, pues le seguí el juego.

-¿Sabes que eres muy guapo?

-Supongo…

-Supones bien ¿Y qué te parezco yo? ¿Soy mona?

-Yo te veo más guapa que una mona.

-Ainss qué tonto eres… -La chica me golpeaba con delicadeza.

La verdad que el tono afrancesado arábigo de su voz no me molaba nada, pero realmente no soy ningún Banderas, y oye, la chica parecía contenta, y no sé por qué acabamos en mi habitación. Yo ya estaba aplaudiendo…parecía que al fin iba a perder mi virginidad.

Pero…en verdad, bueno, no sabía si contar todo esto. Lo he estado pensando mucho y como al final se han enterado casi todos mis amigos y se han partido tanto el culo que ahora graciosamente me llaman “Bandera de Japón”

No penséis mal. Realmente no creo que pasase nada. Es más, yo seguía con el calzoncillo puesto, y el culo no me dolía ni nada, pero la situación era demasiado violenta y huí de allí.

Cuando me desperté, la chica árabe no estaba en mi cama. A mi lado se encontraba Amir, también en calzoncillos…Yo no sé qué tomé y ni siquiera sé si era droga o alcohol y solo sabe Dios qué tendrían aquellos pasteles, pero el olor en la casa era mareante, y la situación me superó.

Yo me levante y recogí mis cosas sin decir nada. Ya en la calle llamé al único que se me ocurrió…No sabía qué hacer… y no… no fue a Nick Fury. De hecho, él no sabe nada de mí desde hace tiempo. La verdad que lo echo de menos…

-“Gustavo” tío, me tienes que dejar pasar unos días en vuestro piso, creo… creo… que me han hecho algo por detrás… ¿y si ya no soy virgen analmente?, yo no noto nada en mi culo… Además que el calzoncillo lo sigo teniendo puesto… La verdad que no me acuerdo de nada.

Ahora es cuando me juré a mi mismo que siempre antes de contar este tipo de “bombazos”, tengo que asegurarme que la persona que me coge el móvil es con la que quería hablar.

-“JAJAJAJAJAJAJAJA”

La risa se alargó bastante, e incluso sentí como se le caía el móvil y se seguía riendo… y conocía esa carcajada; se trataba nada más y nada menos que de “La Guapa”

-Pásame con Gustavo, “La guapa”, pásame con él por favor. Deja de reírte ya coño…”

Tras un ruido de pasos y un lejano “¿Qué te pasa?” supongo que La Guapa le señaló el móvil mientras se seguía riendo. Gustavo agarró el teléfono y me contestó:

-¿Sí?

-¿Gustavo?

-Uff…Qué has hecho para que esta no pare de reírse…

Le conté todo, y Gustavo me contó que no habían encontrado compañero, que La Fea, no volvió este año al piso, y que “Manchacomics” se había ido a un piso con unos primos, y por tanto les vendría bien un dinero extra. Sin embargo, me dijo que primero tendría que hablar con “La Guapa”.

Yo me fui a una cafetería y me tome un café con una magdalena mientras esperaba su respuesta. Al cabo de un rato, me llamó “La Guapa” y me dijo que si le volvía a contar lo de que ya no era virgen analmente, me dejaría volver al piso. Quizás una persona orgullosa hubiera rechazado, pero yo temía más volver a enfrentarme a Amir que a la risa de “La Guapa”, así que tras volver a aguantar unas carcajadas de ella, Gustavo me dijo que vendría a por mí.

Gustavo vino al rato con el coche. Subí, recogí todas mis cosas como pude y me largué de allí. Amir me miraba desolado, y Asad bastante contento… Realmente no sé qué pasó esa noche, y espero no saberlo nunca.

Ya en el piso viejo, me sentí como en casa. Era como volver al hogar junto a mis padres, pero sin ellos. No sé porqué, pero me sentía bien, como si hubiera vuelto a donde tenía que estar. Excepto que en mi cuarto, es ahora un poco más grande ya que antes lo usaba el “manchacomics”. Hay que destacar que La Guapa, con todo su cariño que la caracteriza, me ha puesto en la puerta una bandera de Japón…

Debería sentirme humillado y abochornado por culpa suya, pero realmente me alegro de haber vuelto, echo de menos a “manchacomics” y a “la fea”. Pero la vida es cambio, y la verdad que yo necesito dormir algo más. Al menos he tenido el puente del pilar para descansar un poco...

A ver qué tal se me dan los primeros parciales, aunque en el quiosco supongo que podré estudiar...

Un saludo a todos los que seguís mi vida, y no me busquéis por los quioscos… ¬¬

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